Río Genil
Sarcófago de hormigón y un atentado contra la naturaleza.
La clase política ha renunciado a su recuperación, rechazando dinero que financiaría el coste total y fiando la remodelación a EMASAGRA que, curiosamente, cobra 200.000 euros anuales por limpiar la vegetación y que todo siga igual.
El Río solo hace el trabajo de renaturalización, pero las autoridades se encargan de “limpiarlo”.